La agroexportación ingresó en abril US$2416 millones, US$1605 millones de ellos con el llamado dólar soja, lo que representó una mejora del 96,6% versus marzo pasado, según datos de la Cámara de la Industria Aceitera y el Centro de Exportadores de Cereales (Ciara-CEC).
Si se compara contra marzo de 2022, hubo en cambio una caída del 23,8%. En rigor, en marzo del año pasado habían entrado por la liquidación de divisas del agro US$3171,7 millones. En tanto: mientras en los primeros cuatro meses del año pasado llegaron US$11.097,8 millones, en igual período de 2023 lo hicieron US$5218 millones. Es decir: hubo una merma entre un año y otro de US$5879,8 millones.
Por la sequía, ya hubo fuertes impactos en el trigo [10 millones de toneladas menos de producción que podrían haber ido para la exportación], sino también con el maíz, cuya siembra de primera [de los meses de septiembre-octubre] falló en amplias regiones y ahora se está viendo que no hay cereal disponible para cumplir compromisos.
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“La liquidación es el reflejo de una fuerte sequía, de una gran pérdida de volumen, particularmente de maíz de primera que no pudieron sembrar los productores por esta situación climática”, apuntó Gustavo Idígoras, presidente de Ciara-CEC.
Además de lo que ya pasó con el trigo y lo que ahora está ocurriendo con el maíz, el fenómeno climático también significó un duro efecto sobre la soja. En números, mientras que con el maíz la producción retrocedería de los 51 millones de toneladas del año pasado a 32 millones de toneladas en el ciclo actual, según la Bolsa de Comercio de Rosario (BCR) en la oleaginosa el derrumbe entre una campaña y otra será de 42,2 millones de toneladas a 23 millones de toneladas.
La debacle productiva tendrá, además, un fuerte impacto sobre el movimiento final de camiones. Según la BCR, en 2023 caería un 60% el ingreso de camiones a los puertos del Gran Rosario. En efecto, se pasaría de 2.063.385 unidades en 2022 a un nivel proyectado de 808.356 vehículos para este año.
Esta semana, la Bolsa de Cereales de Córdoba había señalado, para el primer trimestre del año, una baja del 85% en las exportaciones de trigo, una merma del 30% en maíz y del 37% en el complejo de la soja.
Idígoras consignó que, por otra parte, hubo un inicio del programa del dólar soja que “viene demorado por el retraso de la cosecha y la alta volatilidad del mercado cambiario”. El dólar soja reconoce un tipo de cambio a $300 para las operaciones que se realicen hasta fin de mayo.
En los últimos días hubo versiones de que el Gobierno llevaría ese tipo de cambio a $350 pero, según pudo saber este medio de diversas fuentes, el ministro de Economía, Sergio Massa, descartó de plano esa posibilidad.
Hoy los exportadores ingresaron en el marco de ese programa la suma de US$80 millones. Como se mencionó, el acumulado que hizo el sector desde el inicio del programa trepa a 1605 millones de dólares. Se trata de una cifra que viene muy por debajo de las anteriores versiones del dólar soja: en rigor, el monto al compararse iguales semanas rondaba los US$5707 millones en el programa de septiembre de 2022 y los US$1941 millones en la edición de diciembre último.
